El Estado Español mantiene estudios sobre los riesgos de desastres de origen hidroclimático. Pero la población tiene poca información sobre las probabilidades que lo amenazan. Luis Cano, en el diario ABC del 02/03/2023, sostiene que nadie puede saber cuándo, dónde y cuánto va a llover con la antelación suficiente como para evitar todos los desastres; pero sí se sabe perfectamente por dónde va a correr el agua cuando ocurra el aguacero y el desbordamiento del cauce.
En España un tercio de los municipios tienen terrenos con riesgo de inundación; en muchos casos, casi todo su territorio. Huelva, Sevilla, Valencia, Valladolid y Gerona son las capitales más expuestas. Cano señala que la gestión del riesgo de inundación necesita de una implicación de todos los sectores de la sociedad, incrementando la consciencia del riesgo de inundación y el fomento de la autoprotección, adaptación y preparación ante el riesgo de inundación, que en gran parte de las ocasiones no está aún asumida por determinados sectores de la sociedad.
España cuenta con un Plan Nacional de Adaptación al Cambio Climático. En el documento elaborado por M. J. Sanz y E. Galán 2021 IMPACTOS Y RIESGOS DERIVADOS DEL CAMBIO CLIMÁTICO EN ESPAÑA. Basque Centre for Climate Change, Leioa, publicado por el Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, se lee que el plan aglutina un conjunto de instrumentos, entre los que destacan el proyecto de Ley de Cambio Climático y Transición Energética, la Estrategia a Largo Plazo para una Economía Moderna, Competitiva y Climáticamente neutra en 2050, el Plan Nacional Integrado de Energía y Clima 2021-2030 y la Estrategia de Transición Justa.
«Esta publicación responde a la convicción de que un mejor conocimiento de los impactos y los riesgos 1 Evaluación Preliminar General de los Impactos en España por Efecto del Cambio Climático, 840 pp, MIMAM 2005. derivados del cambio climático es básico para orientar adecuadamente las políticas públicas dirigidas a prevenir los impactos y facilitar la recuperación tras los daños. El Informe tiene como principal objetivo llevar a cabo un análisis y síntesis de los principales impactos del cambio climático en un total de 10 ámbitos de trabajo, o sectores y sistemas naturales, considerados prioritarios (recursos hídricos, ecosistemas terrestres, agricultura y ganadería, medio marino, costas, áreas urbanas, salud, energía, transporte y turismo) en base a la información disponible.
Además, presenta una propuesta inicial de los riesgos derivados de estos impactos y una valoración preliminar de la urgencia para ser abordados. Este Informe puede servir además para orientar el trabajo de las futuras publicaciones sobre la evolución de los impactos y riesgos derivados del cambio climático, que se elaborarían con una periodicidad al menos quinquenal tal y como recoge el proyecto de Ley de Cambio Climático y Transición Energética. Esta información, junto con la relacionada con las políticas y medidas destinadas a aumentar la resiliencia y disminuir la vulnerabilidad frente al cambio climático en España, será clave para cumplir con los objetivos de información asumidos en la normativa internacional y europea».
En el Resumen Ejecutivo de los Planes de Gestión del Riesgo de Inundación de Segundo Ciclo (2022-2027) en las Cuencas Intercomunitarias se señala que la cartografía de zonas inundables, ya elaborada junto con la aprobación de la modificación del RDPH en 2016 en materia de limitaciones a los usos del suelo en las zonas inundables, ha supuesto un importante hito a la hora de evitar un incremento del riesgo de inundación.

En materia de colaboración y coordinación con las autoridades de Protección Civil, si bien se ha realizado un importante esfuerzo durante el primer ciclo, es necesario dar un nuevo impulso a los trabajos derivados de los contenidos de la nueva Ley del Sistema Nacional de Protección Civil, creando e implantando dentro de la Red Nacional de Información las alertas hidrológicas de las distintas cuencas hidrográficas y realizando una evolución tecnológica de los sistemas de seguimiento hidrológico y de apoyo a la decisión.
En cuanto a conservación y mantenimiento de cauces, durante el primer ciclo se ha realizado una fuerte inversión; se ha aprobado la Instrucción del Secretario de Estado de Medio Ambiente que establece los condiciones para las actuaciones, se ha publicado la guía de buenas prácticas en materia de conservación de cauces que ha de guiar las nuevas actuaciones que deben someterse también a una evaluación de su funcionalidad para garantizar una optimización de los presupuestos disponibles. En materia de actuaciones estructurales, se han estudiado durante el primer ciclo con profundidad 30 actuaciones que han permitido seleccionar y optimizar las alternativas previstas que se irán poniendo en marcha durante este segundo ciclo, a la vez que se realizan nuevos estudios de nuevas posibles actuaciones. En materia de restauración fluvial, durante el primer ciclo se han desarrollado importantes proyectos que han mostrado que es compatible incrementar los valores ambientales de los ríos a la vez que se mitiga el impacto de las inundaciones. En este segundo ciclo, es necesario desarrollar nuevos proyectos y mejorar el seguimiento de los mismos.